Para las personas ajenas, hacer una donación filantrópica puede parecer tan simple como girar un cheque, realizar la deducción de impuestos y asignar un nombre a un nuevo edificio, programa o causa. Sin embargo, una nueva generación de financiadores dirigidos por el propósito está cambiando la definición de lo que significa invertir capital que resuelva problemas. Y una nueva generación de profesionales está ayudando a guiarlos a los resultados dirigidos por el propósito.

Descubrir el “por qué” detrás del propósito

Históricamente, las familias filantrópicas se centraban únicamente en otorgar subvenciones a organizaciones sin fines de lucro específicas que se ajustaban a sus áreas de interés. Sin embargo, el comportamiento de las oficinas de familias de ingresos netos ultraelevados, una fuente de patrimonio fundamental del sector público, va más allá del pensamiento de los dos bolsillos para pasar al pensamiento de inversores de capital de un bolsillo. Es decir, en lugar de considerar que la filantropía es una calle de un solo sentido en cuanto el otorgamiento de subvenciones, invierten el capital, en función de sus valores y metas de impacto, en una gama de modelos de negocio, desde organizaciones sin fines de lucro hasta organizaciones híbridas y organizaciones con fines de lucro. Comprender su “por qué” es un primer paso fundamental para asegurar que el impacto se siga centrando en lo que es más importante para la familia y se mantenga alineado durante varias generaciones.

“Estas familias y personas a menudo buscan orientación para identificar, expresar y poner en práctica su visión del mundo”, dijo Avery Fontaine, jefa de filantropía e impacto en PNC Private Bank Hawthorn. “Trabajamos con cuando menos nueve opciones de instrumentos, algunos en el área de organizaciones sin fines de lucro, otros no, para facilitar el propósito de una familia a corto y largo plazo. De ahí sacamos nuestra auto orientación. Tenemos el trabajo de ayudar a la familia o persona a lograr sus metas. Asimismo, las organizaciones sin fines de lucro con las que trabajamos también necesitan ayuda para asociarse mejor con estas familias. Este cambio de comportamiento está transformando la capitalización y la recaudación de fondos de las organizaciones sin fines de lucro”.

Identificar el “qué” de su propósito

Al establecer el “por qué”, la siguiente pregunta evidente sería el ¿“qué”? ¿Pero exactamente qué? Tradicionalmente, las familias preguntarían, “¿qué áreas vamos a financiar?” o “¿con qué organizaciones sin fines de lucro nos asociamos en este asunto?” En lugar de ello, la versión moderna de esto es, “¿qué problemas queremos resolver y con qué tipos de capital queremos hacerlo?” Hay varios ejercicios que exploran los comportamientos preferidos, las ubicaciones, los estilos de participación, los cronogramas, las metas de la generación en ascenso, las causas raíz y los niveles de anonimato. Con unas pocas preguntas, el equipo de filantropía e impacto de PNC Private Bank Hawthorn adapta la experiencia a la familia o persona. En última instancia, esto genera un resultado que es más completo y útil para la familia que el enfoque tradicional de emplear el proceso de eliminación en una larga lista de ámbitos.

El “cómo” de todo

Identificar por qué una persona o familia necesita involucrarse en un propósito común y luego examinar qué problemas resolver son pasos iniciales necesarios. Desde luego, la meta es determinar cómo poner estas ideas en práctica. Una nueva estrategia es emparejar una organización 501(c)(4), que no es un vehículo benéfico, con un fideicomiso benéfico o un fondo asesorado por el donante. Vemos que las familias Koch y Chouinard (Patagonia) hacen esto: defienden sus creencias mediante la creación de políticas y vinculan un componente filantrópico. “La creciente concientización de que hay varios caminos para la resolución de problemas, a menudo de forma simultánea, provoca que muchas personas y familias dirigidas por el propósito reflexionen sobre los viejos estereotipos de la filantropía y busquen un enfoque empresarial más disruptivo”, dijo Fontaine. “No van a abandonar la filantropía, sino que más bien están emparejando el otorgamiento de subvenciones con organizaciones sin fines de lucro que ofrecen defensa, cabildeo e iniciativa empresarial social para inyectar recursos a los ecosistemas que según ellos necesitan más ayuda”.

Por lo tanto, si bien la filantropía es una herramienta maravillosa para tener en la caja de herramientas, PNC Private Bank Hawthorn se ha ubicado en la delantera en cuanto a ofrecer y profesionalizar el concepto del “asesoramiento dirigido por el propósito” en lugar del “asesoramiento filantrópico”.

Se trata de un enfoque que ayuda a las personas y familias que tienen una mentalidad filantrópica no solo a maximizar su impacto, sino también a resolver los problemas que consideran más relevantes.

“Definitivamente, los cambios tecnológicos y generacionales que todos estamos experimentando están generando una sensación renovada de posibilidades y oportunidades para resolver problemas antiguos como la pobreza, el hambre, los deficientes resultados de la educación, las enfermedades y el acceso a la atención médica, por nombrar algunos”, dijo Fontaine. “Es un momento emocionante para quienes se toman en serio la alineación de sus valores y su impacto, así como asegurar que el propósito de su familia perdure en las próximas generaciones”.

Para obtener más información o hablar con un asesor de propósito, comuníquese con su equipo de PNC Private Bank Hawthorn.