Olvide lo que dicen las cifras. Cuando se involucra la transición de propiedad de una pequeña empresa, es un asunto personal.

Ser dueño de una empresa implica solicitar préstamos, sacrificarse y trabajar de noche y los fines de semana. Pregúntele a cualquier empresario: pone todo en juego día tras día.

Entonces, ¿qué sucede cuando llega el momento de retirarse? Ya sea que vaya a vender una empresa, comprar una empresa o ceder la empresa a un familiar o empleado, ¿cómo se sumarán los años de trabajo, preocupaciones y pequeñas victorias en un balance general o en un estado de resultados?

“En PNC Bank, hemos participado en muchas transiciones de propiedad”, menciona Shana Peterson-Sheptak, vicepresidenta ejecutiva y jefa de banca empresarial de PNC Bank. “Cuando se trata de una pequeña empresa, el orgullo de ser un propietario es un factor crucial en la mayoría de las transacciones. Están las memorias y el arduo trabajo que conlleva su creación. Naturalmente, las emociones entran en juego”.

Eso significa que, sin importar el tipo de transición de propiedad que se esté produciendo, la objetividad es su mejor activo durante todo el proceso. Al estar preparado con ese conocimiento, es más sencillo realizar una transición de propiedad que no provoque que en algunos años diga “hubiera, debería o podría haberlo hecho”. Es por ello que asociarse con fuentes externas imparciales como los banqueros empresariales de PNC, puede reducir la incertidumbre que acompaña a una decisión tan emocional.

Entonces, ¿está listo para comprar, vender o entregar el cargo? Estas son algunas cosas que debe tener en cuenta.

Primero, conozca cuáles son sus objetivos.

Sin importar lo que esté intentando lograr, cualquier cambio de propiedad es un trayecto tanto para el comprador como para el vendedor. Implica mucho más que simplemente llegar a un acuerdo en cuanto al precio y firmar los documentos. En lugar de ello, lo mejor es abordar un cambio de propiedad con la mentalidad de que este será un evento que cambiará la vida de ambas partes involucradas. En este punto, el comprador y el vendedor deben hablar con un banquero sobre otros temas además de cómo obtener un préstamo empresarial y completar la transacción.

“Hay propietarios de empresas que desean un descanso bien merecido y desean jubilarse con los ingresos”, declara Peterson-Sheptak. “Por otro lado, una persona que compra una empresa se está aventurando a un estilo de vida que es tanto demandante como gratificante. Como resultado, siempre preguntamos a nuestros clientes: “¿qué es lo que desea obtener?”

Eso significa que debe tener una idea bien definida de lo que la transición de propiedad hará por usted. Así como el trayecto que deberá recorrer para lograrlo.

Por ejemplo, ¿la venta de la empresa proporcionará al propietario actual los medios ya sea para jubilarse o pasar a otros asuntos? Para quienes van a comprar una empresa, las preguntas se vuelven incluso más insistentes: ¿la visión de ser dueño de una empresa coincide con la realidad de la responsabilidad diaria? ¿Tiene un plan de negocio realista? ¿Su empresa proporcionará los ingresos necesarios para justificar su riesgo financiero?

Para responder la pregunta a cabalidad, necesita la mentalidad, la orientación y la experiencia correctas de un socio bancario, como PNC.

En segundo lugar, debe saber que se trata de una actividad en equipo.

Ser propietario de una empresa requiere un sentido prevaleciente de optimismo, así como niveles iguales de firmeza y determinación. Sin embargo, aunque la confianza es indispensable, también lo es conocer sus limitaciones.

“Hemos trabajado con muchas pequeñas empresas a lo largo de los años”, continúa Peterson-Sheptak, “y todas las que tienen éxito tienen una característica en común. Constantemente se dan a la tarea de buscar información, asesoramiento y orientación”.

Ninguna persona lo sabe todo. Y todo mundo sabe algo. Esto nunca es tan cierto como cuando se trata de una transición de propiedad. Contar con un grupo de asesores y, lo que es más importante, seguir sus consejos, puede generar una diferencia marcada en los resultados. 

 “Algo que hacemos es ayudar a los clientes a incorporar profesionales cualificados en la ecuación”, añade Peterson-Sheptak. “Esto ayuda a garantizar que el plan de transición beneficie tanto al propietario como al vendedor. Ninguna transacción es igual a otra, lo que significa que no hay reglas absolutas en términos del tipo de asesoramiento que necesitará. Sin embargo, si bien la experiencia requerida puede variar, tener a las personas correctas en su equipo es indispensable para lograr los resultados que desea”.

Teniendo eso en cuenta, ¿quién podría formar parte de su equipo asesor? Entre otros:

  • Banquero empresarial. Sin importar si va a comprar o vender una pequeña empresa, un banquero empresarial con experiencia le ayuda a sentar las bases y le guía a través del proceso de transacción de principio a fin.
  • Abogado de fusiones y adquisiciones. Es fundamental contar con alguien que le explique las complejidades legales de la compra y la venta de una empresa.
  • Contador público certificado. Casi todas las ventas de empresas generan un evento impositivo. Un contador público certificado que tenga experiencia en fusiones y adquisiciones puede ayudar a determinar y disminuir las posibles consecuencias fiscales.
  • Asesor de tasación. Antes de que el comprador y el vendedor puedan acordar un precio, es importante saber si dicho precio está basado en la realidad. Un asesor de tasación examinará objetivamente los activos, el rendimiento y la posición de mercado de la compañía para ayudar a generar una comprensión sólida del verdadero valor de la compañía.
  • Abogado patrimonial. Dependiendo del tamaño y la naturaleza de la transacción, un abogado patrimonial puede ser invaluable en la creación de las estructuras que protejan el patrimonio recién adquirido del vendedor.

Peterson-Sheptak hace hincapié en la necesidad de contar con el conocimiento más específico posible conforme a las necesidades de la transacción.

“Para usar una analogía del ámbito deportivo, un banquero empresarial debe ser el mariscal de campo de la transición de propiedad, pues debe ayudar al propietario o al comprador a identificar y reunir los mejores recursos. En todas las profesiones hay especialistas. Por ejemplo, si va a comprar una propiedad comercial, necesitará contadores y abogados que comprendan las inversiones inmobiliarias.

“Es por ello que nuestros banqueros empresariales se mantienen en contacto con profesionales de cada nicho concebible posible del mundo empresarial. De esa manera, cuando uno de nuestros clientes necesita asesoramiento sumamente técnico y específico, no solo conocemos a una persona, sino que conocemos a la persona correcta”.

Kao’s y Cappy’s. Un caso de estudio de éxito.

Le presentamos a Silong Kao, un cliente de PNC. Es el orgulloso propietario de Kao’s, el negocio que lleva su nombre y sirve comida tailandesa a los complacidos clientes en Elkhart, Indiana. Para Silong, Kao’s es más que una empresa. Es una obra de amor.

“Disfruto las relaciones que establecemos con los clientes” dice Kao. “Es divertido, y no implica simplemente realizar la misma tarea un día tras otro. Tener una empresa de hospitalidad es gratificante”.

A medida que el restaurante Kao’s creció con el tiempo, lo único que quería era desarrollar su éxito. Fue entonces que descubrió que un importante restaurante cercano, Cappy’s, estaba en venta. Identificó una oportunidad.

“Cappy’s tenía seguidores leales, así que yo quería iniciar la conversación. Sin embargo, al mirar atrás, subestimé la cantidad de tiempo que me tardaría para lograr que todo se hiciera realidad. Al principio, nuestra principal preocupación era cómo conservar su clientela. Aparte de ello, el propietario de Cappy’s estaba un poco indeciso en cuanto al trato porque quería asegurar que sus clientes leales siguieran estando contentos con la comida y el servicio. Nosotros éramos más jóvenes y no teníamos años de experiencia con el restaurante”.

Eso significaba que teníamos que generar mucha confianza de parte del comprador y el vendedor por igual. Un banquero de pequeñas empresas de PNC estuvo con Silong durante todo el proceso, ayudándole a comprender todas las complejidades de la adquisición, sin mencionar la diligencia debida detrás del financiamiento de la transacción.

“Mi banquero de PNC me dio las pautas de lo que debería esperar si quería comprar otro restaurante”, continúa Kao. “Eso incluyó lo que sucede desde que el vendedor acepta la oferta hasta el trámite del préstamo y la documentación. Al mismo tiempo, recibí asesoramiento sensato sobre comunicarme bien con el vendedor y asegurarme de comprender por completo el proceso para obtener un préstamo de la SBA. Fue de gran ayuda que él me explicara el vocabulario bancario”. 

Desde las conversaciones iniciales hasta la compra definitiva, el trayecto de Kao tardó seis meses en total. Afortunadamente, tuvo a PNC a su lado en cada paso del camino. En ocasiones, eso implicó que se le brindara asesoramiento objetivo. En otras, implicó asegurar que todos los pasos se realizaran en el orden correcto. Hoy en día, Kao está feliz de informar que Cappy’s no ha omitido ningún paso, pues continúa atendiendo a los clientes leales con su menú de mucho tiempo.

Haga que su transición funcione.

En resumen, la transición de propiedad nunca es una tarea simple. Sin embargo, al contar con la planificación y la experiencia adecuadas, puede ser más sencilla. Si está considerando vender, comprar o ceder la propiedad, asegúrese de contar con el equipo correcto, así como la mentalidad correcta. Para obtener más información sobre cómo lograr que su transición sea exitosa, contáctenos hoy mismo. Y entérese cómo hacer las cosas de la manera correcta puede marcar una diferencia drástica en sus metas a largo plazo.