Estados Unidos necesita nuevas pequeñas empresas para tener éxito. Los nuevos propietarios de empresas deben ser inteligentes con respecto a cómo realizar la planificación financiera para el lanzamiento de sus compañías.

Si está pensando en abrir una empresa, está en buena compañía. De hecho, según la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, en el 2023 se observó un número sin precedente de 5.5 millones de nuevas solicitudes empresariales.[1]

Esta ráfaga de emprendimiento es algo bueno por varias razones. Por ejemplo, las pequeñas empresas son un poderoso generador de empleo, ya que el 55 por ciento de la creación neta de empleos entre los años 2013 y 2023 proviene de pequeñas empresas.[2]

Obviamente, las pequeñas empresas también pueden generar riqueza y seguridad económica para quienes están dispuestos a establecerlas. Aunque abrir una nueva empresa es un acto de optimismo en cuanto al futuro, sigue siendo importante tener una visión clara de los desafíos que conlleva abrir y dirigir una empresa cuya duración puede ser de años o décadas. De hecho, aproximadamente el 20 por ciento de las empresas nuevas cierran durante el primer año de su apertura.[3]

Muchos de los factores que determinarán si una nueva empresa será próspera o tendrá dificultades están fuera del control del empresario. Los factores macroeconómicos, por ejemplo, si la economía se encuentra en recesión, las tasas de interés cambian y la opinión del consumidor, pueden jugar un papel fundamental en el destino de una joven compañía.

Recuerde el propósito de su empresa

No obstante, los empresarios pueden dar a sus compañías la mejor oportunidad de tener éxito al enfocarse en las áreas clave que están dentro de su control. Una tiene que ver con la mentalidad de un nuevo propietario de empresa.

Por ejemplo, a menudo puede parecer que abrir una nueva empresa implica responder a una serie de preguntas aparentemente interminables que empiezan con “qué” o “cuál”. ¿Qué productos y servicios debemos ofrecer? ¿Cuál es el horario de atención de nuestras tiendas y en qué quiero que mis empleados centren su tiempo y atención? ¿Qué nos distingue de los competidores?

Todas estas son preguntas muy importantes que se deben plantear y responder. Sin embargo, los nuevos propietarios de empresas también deben comprender por qué van a abrir una compañía. ¿Acaso es por motivos personales, como el deseo de tener el control de su horario y tiempo de una manera que puede resultar imposible si tiene un empleo tradicional? ¿Se debe a que ha desarrollado un producto o servicio innovador que puede beneficiar a los clientes y las comunidades de una manera única? ¿Se debe a que cree que puede ganar más dinero como propietario de empresa que como empleado?

La claridad en torno a por qué decidió iniciar su compañía es esencial tanto por razones personales como por razones financieras. De hecho, comprender y comunicar con claridad la misión de su compañía puede conectarlo con sus clientes de una manera que podría ser imposible si la relación fuese puramente transaccional. Esto puede ayudar con la adquisición y retención de clientes, aunque también puede permitir que sea fácil tener constancia con respecto a cómo comercializa su compañía.

Desde el punto de vista de la planificación financiera, tener claro su propósito le ayuda a priorizar todo, desde las inversiones de capital que realiza hasta la contratación, la búsqueda de fuentes de financiamiento e incluso la planificación de la sucesión.

Opciones y oportunidades de financiamiento

Si desea convertirse en empresario, deberá sentirse cómodo con las preocupaciones referentes al dinero. Eso empieza con la búsqueda del dinero necesario para poner su empresa en marcha y funcionando sin problemas.

Incluso antes de considerar las fuentes de financiamiento, es prudente que calcule cuánto necesitará para empezar. La Administración de Pequeñas Empresas (SBA) de los EE. UU. ofrece orientación para ayudar a los empresarios a hacer una estimación de sus costos iniciales.[4] Esto incluye considerar los fondos necesarios para espacio de oficina, equipo, licencias y permisos, inventario, seguro y otras necesidades.

Cada empresa tendrá una combinación particular de gastos que cubrir. Una vez que tenga una idea aproximada de lo que necesitará para hacer que su nueva idea de negocio se vuelva realidad, deberá considerar las opciones de financiamiento, que incluyen:

  • El autofinanciamiento es exactamente eso. El dinero para el lanzamiento de su empresa puede salir de su cuenta de ahorros o puede pedir a sus amigos y familiares que colaboren. Esto puede ser atractivo porque permite que el propietario de la empresa conserve el control total de su compañía. Sin embargo, también significa que usted asumirá todo el riesgo, además de la desventaja de perder su patrimonio personal si la empresa quiebra.
  • Las empresas de capital de riesgo proporcionan financiamiento para ciertas empresas emergentes que tienen un alto potencial de crecimiento. Las inversiones de riesgo pueden ser grandes, aunque también requieren la cesión de un porcentaje de participación en la compañía y cierto nivel de control en la operación del negocio.
  • Los inversionistas ángeles por lo general son personas ricas que utilizan su propio dinero para respaldar a compañías emergentes. Al igual que los inversionistas de capital de riesgo, los inversionistas ángeles querrán obtener una participación en su compañía, y la capacidad de influir en las decisiones del negocio. En el caso tanto de los inversionistas ángeles como de los inversionistas de riesgo, la experiencia y la orientación proporcionada puede ser de gran ayuda para los nuevos propietarios de empresas.
  • Los préstamos personales pueden ser una fuente de financiamiento valiosa, ya que a menudo se procesan con rapidez y pueden tener tasas de interés bajas. Sin embargo, requieren un puntaje de crédito alto y no siempre tienen montos lo suficientemente grandes para cubrir los costos iniciales de una compañía nueva.
  • Los préstamos para pequeñas empresas pueden tener montos más elevados que los préstamos personales. Para mejorar la probabilidad de obtener uno, resulta útil tener un plan de negocio, pronósticos de ingresos y un cálculo detallado de sus gastos. La SBA ofrece micropréstamos, los cuales están diseñados para apoyar a las compañías que no califican para otro tipo de financiamiento.[5]
  • Las subvenciones para pequeñas empresas tienen una demanda comprensiblemente alta porque se trata de dinero que no se tiene que reembolsar. Las subvenciones a menudo se designan para ayudar a cierto tipo de empresario, por ejemplo, propietarios de pequeñas empresas de veteranos, mujeres y propietarios de pequeñas empresas de minorías.[6]

Realice el lanzamiento de su empresa considerando un plan de sucesión y salida

El lanzamiento de una empresa puede parecer un momento extraño para pensar en salir de la compañía o transferirla a alguien más para que la administre o se convierta en propietario. Sin embargo, la fase inicial es el mejor momento para empezar a elaborar algunas estrategias básicas para la siguiente fase en la vida de su compañía.

¿Por qué? En un nivel muy básico, es posible que no sepa cuándo llegará la necesidad de abandonar la compañía. Aproximadamente la mitad de todas las salidas de las empresas son imprevistas y son provocadas por el fallecimiento, una discapacidad, el agotamiento o un divorcio.[7] Diseñar un plan de salida desde el inicio de una empresa significa que habrá un enfoque estructurado y coherente para salir de la empresa y disfrutar de cualquier ventaja financiera que haya trabajado para lograr.

Un plan de sucesión puede formar parte de un plan de salida, ya que brinda orientación con respecto a quién se encargará de su compañía y qué cargo seguirá ocupando usted, si es que llega a ocuparlo.

Muestre los marcadores de un flujo de caja sano y una correcta administración fiscal

En nuestra vida diaria, somos lo que hacemos. Esto significa que nuestros hábitos y conductas nos definen en gran medida. Lo mismo sucede con las empresas.

Es por ello por lo que es tan importante que las compañías nuevas inicien su vida con hábitos sanos de flujo de caja y de administración fiscal. Establecer una base sólida para el flujo de caja y la administración fiscal aumenta la probabilidad de que las compañías continúen funcionando de forma responsable a medida que crecen y maduran. De hecho, establecer esos buenos hábitos temprano aumentará la probabilidad de que su empresa crezca y tenga éxito, en particular si necesita atraer a nuevos inversionistas.

El lanzamiento de una nueva empresa es un momento de emoción y preocupación. Prestar mucha atención a la planificación financiera y los hábitos que necesitará como empresa emergente le ayudarán a colocarse en el camino hacia el éxito futuro.