La inteligencia artificial (IA) y la internet de las cosas (Internet of Things, IoT) probablemente tendrán contacto con las facetas de casi todos los sectores. La IA permite que las computadoras y los dispositivos digitales aprendan, lean, escriban, conversen, vean, generen, jueguen, analicen, den recomendaciones y hagan otras cosas que hacen los humanos.[1] Las empresas tienen la posibilidad de aprovechar al máximo los beneficios de usar la IA al hacer uso de los datos recopilados por la IoT. La IoT es la red de objetos físicos, usualmente dispositivos “inteligentes” que incorporan sensores, software y otras tecnologías, con la finalidad de conectar e intercambiar datos con otros dispositivos y sistemas a través de internet.[2] La aplicación de estos dos elementos en conjunto puede generar eficiencias tanto en la recopilación como en la administración de los datos, al mismo tiempo que genera la consistencia y la transparencia que tienen la posibilidad de dar lugar a ahorros en los costos.

Los propietarios de pequeñas empresas que no forman parte de los sectores relacionados con la tecnología podrían pensar que la IA y la IoT están lejanas y que no aportan la suficiente transformación como para justificar la reconsideración de la manera de hacer negocios. Sin embargo, los agricultores, tenderos, restauranteros y todas las personas a lo largo del canal de distribución de alimentos pueden beneficiarse de tales desarrollos. Las tecnologías digitales pueden ahorrar tiempo y horas laborales, mejorar la seguridad de los empleados y ayudar a gestionar el ciclo de flujo de caja y el ciclo económico.

Por ejemplo, las tecnologías inteligentes pueden ayudar a los agricultores a optimizar el rendimiento de los cultivos al proporcionar datos en tiempo real sobre la salud de la tierra y las condiciones del clima. Los tenderos pueden optimizar la administración de inventarios a través de sensores impulsados por la IoT y herramientas de comportamiento del cliente dirigidas por la IA. Los propietarios de restaurantes pueden hacer uso de los análisis de IA para predecir la demanda y actualizar los menús, lo que personaliza la experiencia gastronómica para desarrollar la satisfacción y lealtad del cliente. Estos son impactos reales que tienen la posibilidad de incrementar los ingresos totales y reducir los costos.

Estas son algunas maneras específicas en las que la IA está generando un valor real en el sector de alimentos y bebidas:

  1. Invertir en el compromiso del cliente habilitado por la IA: Las herramientas habilitadas por la IA pueden medir el comportamiento del cliente, involucrar su participación en tiempo real, ayudar a abordar los problemas con los residuos y proporcionar productos y servicios mejorados a un mayor número de clientes. Sin embargo, una estrategia de IA requiere una planificación e inversión meditadas, pero el rendimiento a largo plazo podría ser considerable. 
  2. Adoptar software de compromiso omnicanal: El software de compromiso omnicanal que aborde las necesidades del cliente las 24 horas del día, los 7 días de la semana, sin requerir mano de obra adicional, y que pueda mejorar los márgenes de ganancias en lo que actualmente es un sector de márgenes bajos. 
  3. Integrar la IoT para que la cadena de suministro sea más sostenible: Combinar las herramientas IA con la visibilidad de la cadena de suministro habilitada por la IoT para promover las operaciones comerciales y la administración que tienen la posibilidad de reducir los residuos y aumentar las ganancias. Si la empresa tiene un buen rendimiento, los inversionistas de dichos proyectos pueden beneficiarse del aumento de la eficiencia operativa.[3] Los propietarios de pequeñas empresas deben esforzarse para equilibrar las preferencias de los consumidores con la sostenibilidad a largo plazo a fin de promover las prioridades de los consumidores de hoy en día. 
  4. Mejorar la rentabilidad mediante la realización de inversiones en tecnología: La rentabilidad también puede aumentar mediante la realización de inversiones en sistemas de punto de venta digitales y móviles equipados con IA. Al hacer uso de las tecnologías inteligentes, los gerentes tienen la facultad de tomar decisiones informadas basadas en datos y elaborar estrategias promocionales personalizadas para aumentar las ventas. Implementar pagos integrados para optimizar las transacciones también es una manera de reducir los costos.

Dichas tecnologías pueden ser redituables a largo plazo, aunque hay factores de riesgo y de inversión que se deben tener en cuenta. También hay discusiones éticas que deben tener lugar para determinar si los datos recopilados y los medios para su recopilación son coherentes con los valores y la cultura de la compañía. Además, la transparencia es fundamental para mantener la confianza de los clientes y garantizar que la privacidad sea una prioridad al momento de calcular los beneficios y riesgos de la implementación de estos nuevos tipos de tecnologías.

Asimismo, al evaluar los costos, en particular los de una pequeña empresa, será importante evaluar el retorno de inversión para garantizar que la inversión de capital inicial realizada en estas tecnologías genere un beneficio perdurable que no se podría lograr con los sistemas y procesos actuales. En el caso de las empresas más grandes, la escala justifica el costo, aunque en el caso de las pequeñas empresas, quizás ese no necesariamente sea el caso.

Se necesita un enfoque meditado para sortear los desafíos de la implementación, que incluyen los siguientes:

  1. Costos e inversión: Al igual que cualquier emprendimiento comercial, el manejo del precio es una consideración clave. Construir nuevas plantas inteligentes, garantizar la integridad y la seguridad de los datos y ser buenos administradores del capital suponen nuevos desafíos que conllevan posibles riesgos. 
  2. Administración eficaz de cambios: Además de los costos operativos iniciales y las necesidades de inversión constantes, los nuevos procesos y la integración de las tecnologías emergentes requieren la actualización de los procedimientos y de las métricas de rendimiento clave. 
  3. Un cambio cultural: Quizás el impedimento más significativo en cuanto a la adopción de los nuevos sistemas, tecnología y procesos es la aversión humana a las nuevas maneras de hacer negocios. Las empresas deben adoptar una mentalidad de crecimiento mientras utilizan las lecciones que han aprendido del pasado y aplican dicha experiencia de maneras innovadoras.  
  4. Nuevas habilidades y talento: El sector de alimentos y bebidas necesitará capital para impulsar el crecimiento, y probablemente requerirá diferentes habilidades y una fuerza laboral transformada. Las personas de diferentes orígenes y diversos conjuntos de habilidades vocacionales deben integrarse en una unidad cohesiva. Cada eslabón de la cadena de suministro y del proceso de distribución puede aprovechar las nuevas tecnologías para lograr la meta. Sin embargo, los propietarios de pequeñas empresas deben adoptar una estrategia cohesiva, una fuerza laboral cualificada y una cultura digital completa para garantizar operaciones eficaces y eficientes al mismo tiempo que promueven el crecimiento del balance general.

Invertir en tecnologías inteligentes, como los proyectos habilitados por la IoT, tiene el potencial de ofrecer un futuro más rentable para los agricultores, tenderos, propietarios de restaurantes y otros comerciantes de hoy en día en todo el canal de distribución de alimentos. Las iniciativas, que incluyen el uso de sensores y análisis, pueden lograr reducciones significativas de recursos, incluidas las horas de mano de obra y los recursos, lo que impulsa el balance general. Dichas inversiones ofrecen oportunidades atractivas para los inversionistas, lo que contribuye a las operaciones optimizadas al mismo tiempo que genera ganancias para las empresas. Sin embargo, se debe realizar un análisis costo-beneficio que tenga en cuenta los requisitos de capital, factores de riesgo y recursos necesarios para mantener y monitorear los datos generados y la durabilidad de la solución.

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