Después de 3 años de cambios radicales en la atención médica, los proveedores se enfrentan a nuevos retos y a interesantes oportunidades en 2023. Desde los avances en la atención médica accesible hasta el aumento de las expectativas de los pacientes, estas cinco tendencias están listas para causar impacto el año que viene.

1. La inflación presiona a los proveedores

En medio del aumento de los costos, las tasas de reembolso se mantienen estables, y los proveedores sufren las consecuencias. El aumento de los costos laborales y no laborales mermará las ganancias en 2023,[1] y los principales proveedores buscarán maneras de mejorar la productividad para maximizar los ingresos.

En comparación con el año pasado, se prevé que los costos no laborales de atención médica se dupliquen en 2023 debido a la inflación, pasando de $38 mil millones a $77 mil millones.[1]

2. La teleasistencia híbrida continúa creciendo

Los proveedores seguirán ampliando su alcance en la nueva normalidad de atención médica. Los proveedores que adopten la telemedicina buscarán maneras más sencillas de hacer negocios, como el despliegue de plataformas integradas, y recurrirán a soluciones de monitoreo de pacientes a distancia (RPM, por sus siglas en inglés) para la atención continua.




3. La experiencia del paciente ocupa un lugar central

La creciente demanda de un servicio al cliente personalizado se ha extendido a múltiples sectores, incluido el de atención médica.[2] Los líderes ofrecerán una experiencia personalizada y cómoda al paciente, que incluye reservas en línea y comunicaciones multicanal (por ejemplo, mensajes de texto, correo electrónico y teléfono).




4. Las clínicas de salud en locales comerciales ofrecen comodidad, pero con limitaciones

La búsqueda de comodidad lleva a los pacientes a las clínicas de salud en locales comerciales, al menos para las necesidades de atención médica menores.[3] Los proveedores deben centrarse en la educación de los pacientes para que puedan valorar cuándo es necesaria una clínica tradicional o cuándo puede ser más apropiada una clínica en un centro comercial.




5. El paciente como pagador influye en la administración de dinero en efectivo

A medida que los pacientes asumen una mayor responsabilidad financiera por su atención, los proveedores deben explorar maneras de ayudar a los pacientes a pagar sus facturas médicas. Considere opciones como precios transparentes, planes de pago, estados de cuenta electrónicos y soluciones de pago en línea para ayudarle a cobrar lo que le deben.

El 78 % de los proveedores afirman que no pueden cobrar el saldo de un paciente de más de $1,000 en 30 días.[4]


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