Girar cheques sigue siendo una opción para pagar las facturas, dar dinero en un cumpleaños o incluso pagar artículos en la tienda. Sin embargo, debido a que los cheques son un instrumento financiero impreso y no se rastrean automáticamente como un pago digital, requieren un poco más de trabajo en su manejo.
Una parte de girar cheques que puede requerir algo de práctica es el manejo de un cheque pendiente.
¿Qué son los cheques pendientes? ¿Tienen fondos o no? Contestamos sus preguntas sobre este término financiero y lo que debe hacer al manejar un cheque pendiente.
Definición de cheque pendiente
Un cheque pendiente es cualquier cheque girado desde una cuenta bancaria que aún no ha sido cobrado, depositado ni registrado. Puede ser un cheque personal o empresarial.
Cómo un cheque se puede volver “pendiente”
Un cheque se vuelve pendiente simplemente por el hecho de no ser cobrado o depositado. Un cheque que fue girado hace algunos momentos, semanas o incluso meses se considera pendiente si aún no ha sido cobrado o depositado.
El ciclo de vida de un cheque pendiente desde su emisión hasta su compensación
Los cheques son herramientas financieras simples que dependen de que tanto el pagador como el beneficiario actúen para completar el pago. Así es como funcionan los cheques pendientes.
Emisión del cheque
El pagador, es decir, la persona que tiene la cuenta de cheques, gira un cheque a la persona a quien desea pagar el monto del pago. El pagador lo entrega al beneficiario y anota el monto de ese cheque como pago “pendiente” hasta que el cheque sea completamente compensado y el saldo de la cuenta sea ajustado por el banco para contabilizar el pago.
Factores que provocan que un cheque siga pendiente
El beneficiario tiene la responsabilidad de negociar el cheque, ya sea llevándolo a su banco para cobrarlo o depositar en un cajero automático u otra ubicación de servicio o depositándolo a través de una app para la banca móvil en su teléfono. Si lo hace oportunamente, el cheque se compensa y el pago se transfiere de la cuenta bancaria del pagador a la cuenta bancaria del beneficiario.
Una vez que el cheque es cobrado o depositado, ya no se considera pendiente y el pagador puede reconciliar el pago con la transacción pendiente.
Sin embargo, si el beneficiario retrasa el depósito del cheque, el pago no se compensa en la cuenta del pagador. El pagador aún no puede utilizar el monto del cheque, puesto que el monto está comprometido al beneficiario, aunque el saldo de la cuenta bancaria aún no refleja el pago del cheque.
¿Un cheque pendiente tiene vencimiento?
Los bancos establecen políticas propias con respecto al periodo en el que consideran que un cheque es válido. En ocasiones, dicha información aparece impresa en el mismo cheque. Por ejemplo, puede ver la leyenda “nulo después de un año” o un mensaje similar. Cuando el cheque llega a esta fecha de vencimiento, ya no es válido y es posible que el banco desde el que se giró el cheque no haga válido el pago. Incluso si esta política no está escrita en el cheque, la mayoría de los bancos tienen políticas referentes al vencimiento de los cheques. Pregunte al banco emisor del cheque si no está seguro de cuánto tiempo dispone para cobrar o depositar un cheque.
Riesgos relacionados con los cheques pendientes
Los cheques pendientes pueden generar problemas tanto para el pagador como para el beneficiario. En el caso del pagador, crea la necesidad de realizar el rastreo meticuloso de los cheques no cobrados para no gastar dinero en otras cosas. Sin embargo, si su presupuesto se maneja adecuadamente y todos los cheques están marcados como cheques pendientes, sabrá que no debe gastar ese dinero.
Posibilidad de sobregiros y fondos insuficientes
¿Qué sucede si olvida un cheque pendiente? Si ese dinero se gasta en otra cosa, es posible que no tenga suficiente dinero en la cuenta bancaria para cubrir todos sus compromisos de pago. Como resultado, el saldo de su cuenta bancaria puede caer por debajo de $0 y generar cargos por sobregiro. Es posible que el banco también se niegue a hacer válido el cheque pendiente.
El beneficiario se dará cuenta que el dinero no llegó a su cuenta, lo que a su vez incluso podría generar un sobregiro en la cuenta del beneficiario. Como resultado, el beneficiario podría recibir el cobro de cargos por sobregiro si contaba con ese dinero y lo gastó. A usted también se le podrían cobrar cargos adicionales “por pago devuelto”.
El riesgo de los cheques caducados y la necesidad de la anulación de pagos
En el caso del beneficiario, los cheques pendientes tienen el riesgo de vencer o “caducar”. Cuando esto ocurre, el cheque no se puede cobrar o depositar y el pago se debe volver a emitir o realizarse de otra manera. Guardar los cheques mucho tiempo también aumenta la probabilidad de que se extravíen o se destruyan antes de ser cobrados o depositados.
Realizar la anulación de pago de un cheque extraviado o caducado puede prevenir problemas en el futuro, en particular si existe la preocupación de que caiga en manos equivocadas. Sin embargo, esto no siempre resuelve el problema, ya que genera una carga para el pagador y la anulación solo es válida durante un tiempo limitado.
Los costos de los cheques pendientes
El costo de un cheque pendiente no es mayor que el costo del papel en el que se imprimió. Sin embargo, tener que cancelar un cheque o realizar la anulación de su pago puede resultar costoso. Muchos bancos cobran un cargo por hacerlo.
Además, los cheques pendientes pueden ser una molestia para un consumidor que de otro modo es cuidadoso. Monitorear varios cheques que no han sido cobrados durante un periodo prolongado hace que sea más fácil gastar accidentalmente el dinero que se tenía reservado para un cheque y generar cargos por sobregiro.
Qué debe hacer si ha emitido o recibido un cheque pendiente
Todos los cheques están pendientes desde el momento en que se giran hasta el momento en que se compensan. El hecho de que estén pendientes durante unas horas o unos meses depende del beneficiario, quien determina cuándo se cobrará o depositará el cheque.
Si usted ha girado un cheque cuya antigüedad es menor de seis meses, puede hacer lo siguiente:
- Conserve el monto del cheque reservado en su presupuesto o aplicación de banca. No gaste ese dinero y realice el ajuste manual del saldo de la cuenta bancaria para tenerlo en cuenta.
- Póngase en contacto con la persona a quien giró el cheque y pregúntele si está teniendo problemas para cobrarlo o depositarlo. Es posible que en sí no lo haya recibido o que el cheque se haya extraviado. Si este es el caso, realice la anulación de pago del cheque y gire un cheque nuevo.
Si el cheque tiene una antigüedad mayor a seis meses, es posible que haya caducado o sea nulo. Comuníquese con su banco para obtener la información completa. Si ha sido anulado, aún debe realizar la anulación de pago del cheque. Esto evita que alguien intente cobrarlo o depositarlo, lo que podría afectar el saldo de su cuenta. Después puede negociar una resolución con el beneficiario, por ejemplo, usar un método de pago distinto.
Consejos de evitación y resolución
Los cheques pendientes pueden permanecer sin gastarse durante mucho tiempo, pero es posible evitar los cargos por sobregiro y los cargos por fondos insuficientes que se generan debido a que básicamente se gasta el mismo dinero dos veces.
Considere métodos de pago alternativos
Para evitar el problema por completo, usted podría optar por no girar cheques. En lugar de ello, los métodos de pago electrónico en efectivo, como Zelle®, sacan el dinero de su cuenta con mayor rapidez. Si no confía en que el beneficiario hará algo, usted elimina la posibilidad de que el beneficiario olvide o posponga el cobro o depósito del cheque.
Emita una anulación de pago
Otra opción es solicitar una anulación de pago para un cheque caducado o anulado a fin de garantizar que nadie pueda cobrarlo ni depositarlo. Es posible que esto sea necesario si ha esperado meses o más tiempo y no puede lograr el cierre del cheque. Siempre que realice este tipo de solicitud, márquela como “cancelada” en su software o registro contable. Hacerlo permite que el dinero esté disponible nuevamente.
Comuníquese con el beneficiario
Recuerde, si un beneficiario no cobra o deposita un cheque, puede deberse a que está teniendo un problema. La única manera de saberlo es hacer un seguimiento con el beneficiario directamente. Algunas razones comunes por las que no se puede cobrar o depositar un cheque incluyen:
- La pérdida del cheque
- La destrucción del cheque
- No poder acceder a una cuenta bancaria para depositar el cheque
Simplemente es posible que los cheques no sean un método de pago adecuado para el beneficiario. Pregunte sobre otras opciones, como los pagos digitales, que pueden realizarse rápidamente y reducen las probabilidades de que un pago venza o se extravíe.
Mantener en orden un registro contable de finanzas
Resulta útil documentar todos los cheques. Anote la fecha del cheque, el monto, el pagador y el número de cheque en el registro contable que venía con su chequera. Si utiliza una herramienta de elaboración de presupuestos digital o software contable, también debe anotar dichas indicaciones en la partida correspondiente a la transacción.
Siempre y cuando sepa que no debe gastar el dinero que ha prometido a alguien más, es posible evitar las costosas consecuencias, como los cargos por sobregiro o fondos insuficientes.
Al ser proactivo y diligente en el monitoreo de todos los gastos, tendrá una mejor idea de su salud financiera general y podría hacer planes más apropiados para el futuro. También puede comprometerse a mejorar su educación financiera al aprender sobre más temas referentes a las cuentas bancarias y pagos. PNC tiene muchos artículos útiles para ayudarle a sacar el máximo provecho de su dinero.