A medida que se acerca la graduación, la principal pregunta que probablemente escucharás es: “¿Ya tienes empleo?”. Y con buena razón. Graduarse y conseguir un empleo de tiempo completo es uno de los ritos de paso de la graduación. Al tener un empleo de tiempo completo y percibir ingresos estables, la mayoría comienzan a ahorrar para realizar una compra importante, como una casa o un automóvil. Aprender a administrar su dinero adecuadamente es similar a tener una graduación financiera. Dado que no hay educación formal, tendrá que aprender a través de prueba y error. Pero, ¿qué puedes hacer ahora? He aquí tres pasos que te ayudarán a prepararte para tu graduación financiera.

Qué deberías tener como mínimo

Es hora de hacer un presupuesto. Un presupuesto te puede ayudar cuando llegue la hora de tener tus finanzas bajo control. Pero, ¿qué pasa si crees que aún no tienes finanzas que controlar? Esto es lo que necesitas para empezar.

Como mínimo, debes tener experiencia con una cuenta de cheques y una cuenta de ahorros. En el caso de tu cuenta de cheques, hazte el hábito de llevar un control de cada transacción, comparándola con tu balance. En el caso de tu cuenta de ahorros, establece el hábito de agregar fondos a tu cuenta y dejarlos allí.

Para dar un paso más allá, configura una transferencia automática de tu cuenta de cheques a la de ahorros con regularidad. Realiza una transferencia automática cada dos semanas o por lo menos una vez al mes. Hacerte al hábito de ahorrar con regularidad te ayudará cuando llegue la hora de elaborar tu primer presupuesto.

Trata de no gastar tu primer cheque de pago completo en caprichos, aunque resulte tentador, ya que esto te alejará el equivalente a un cheque de pago de establecer tus hábitos nuevos.

Buscar un empleo de tiempo completo

¿Qué pasa si no has podido conseguir un empleo de tiempo completo? Podría parecer frustrante cuando estás listo para graduarte pero tus finanzas no están del todo listas. Esto es lo que puedes hacer.

Empieza por acudir al centro de orientación profesional del campus. Ahí encontrarás ayuda para elaborar tu currículo. Quizás también encuentres talleres que enseñen habilidades para establecer relaciones sociales. Muchas universidades tienen un exclusivo sitio web de empleo con publicaciones que únicamente son para alumnos y ex alumnos.

Además de eso, debes comenzar a establecer relaciones sociales en tu campo. No es solo una muy buena manera de encontrar empleo, sino que es posible que también conozcas contactos clave que te podrían ayudar a lo largo de tu carrera. Contacta a tus profesores de la universidad para ver si tienen contactos en el campo de la carrera a la cual deseas dedicarte. Asiste a eventos relacionados con tu industria y habla con las personas que conozcas ahí. Quizás encuentres oportunidades de pasantía que te podrían dirigir a un puesto de paga completa.

Asegúrate que tu currículo esté actualizado y personalizado con base en cada uno de los puestos para los cuales vas a presentar una solicitud. Dedicar unos cuantos minutos adicionales podría representar la diferencia entre no volver a saber del gerente de contrataciones o recibir una llamada para una entrevista por teléfono.

Cómo conseguir tu propia casa

El paso final para prepararte para tu graduación financiera es encontrar una casa propia. Se trata de una decisión importante y, si vives con tus padres actualmente y no tienes que pagar renta, representará un cambio significativo. Si ya tenías un apartamento mientras estudiabas en la universidad, la transición será más fácil. Sin embargo, si vivías en el campus o en una casa temporal en el campus, quizás sea el momento de encontrar una casa propia. Vivir por tu cuenta o con compañeros de piso implica en sí un conjunto de responsabilidades financieras. Esto es lo que debes tener en cuenta.

Sin embargo, antes de que empieces a buscar un apartamento, es buena idea que tengas algunos cientos de dólares ahorrados. Es posible que tengas que pagar un depósito antes de poder rentar, especialmente si no tienes un historial de renta. Dicho depósito podría equivaler a la renta de 1 o 2 meses y luego tendrás que pagar la renta del primer mes, así como administrar la activación de servicios públicos, televisión por cable, agua, etc.

Para hacer un presupuesto para un apartamento, empieza con tus ingresos actuales. Como regla general, tu gasto de renta mensual no debe superar del 25 % al 28 % de tus ingresos. Así es que, si ganas $2,000 al mes, significa que debes destinar alrededor de $560 para la renta de un apartamento. Dependiendo de dónde vivas, dicho número podría parecer fuera de alcance. Sin embargo, si no puedes hacer que los números coincidan con tus ingresos, quizás debas considerar buscar uno o dos compañeros de piso.

Una vez que tengas tu apartamento, es momento de empezar a amueblar tu nueva casa. Los muebles pueden representar un gasto importante y es fácil visitar una tienda de productos para la casa y comprar muchos muebles a crédito. Sin embargo, dado que estás estabilizando tus ingresos, quizás sea mejor amueblar una habitación a la vez con un presupuesto basado en dinero en efectivo. De esta manera, puedes comprar solamente los artículos específicos que necesitas y evitar una factura mensual.

Puede ser emocionante saber que se acerca la graduación, aunque también te puede poner nervioso si sientes que no estás preparado. No hay por qué sentirse estresado con respecto a la graduación y mucho menos hay motivo para sentirse así con respecto a tu graduación financiera. La preparación es la clave. Emplea estos sencillos pasos para preparar tus finanzas antes de graduarte.