Encontrar el lugar adecuado para alquilar puede ser complicado. Le conviene un lugar bonito en un buen vecindario que se ajuste a su presupuesto, pero considerando los crecientes costos del alquiler, puede ser difícil saber lo que se puede permitir pagar en términos realistas.
Entonces, ¿cuánto debe gastar en alquiler? En general, los expertos recomiendan gastar en vivienda como máximo el 30 % de sus ingresos antes de impuestos. Sin embargo, no siempre es así de sencillo.
Según la Oficina del Censo de los EE. UU., entre 2017 y 2021, más del 40 % de las familias que alquilan (19 millones) gastan más del 30 % de sus ingresos en alquiler[1]. Además, casi una tercera parte de los arrendatarios del país viven en condados en los que el costo de vivienda promedio supera el 30 % de los ingresos familiares promedio.
Al momento de decidir qué parte de sus ingresos se debe destinar al alquiler, es importante comprender los diversos métodos para calcular los umbrales de gastos personales. También deberá tener en cuenta otros factores como la ubicación, su estilo de vida y los costos de vivienda adicionales.
La siguiente guía explica cómo calcular los ingresos brutos, cómo se aplica la regla 50/30/20 al alquiler y algunas situaciones en las que gastar más del 30 % podría resultar lógico. Con esta información, puede tomar decisiones informadas con confianza en cuestiones de alquiler.
Cómo determinar la asequibilidad de alquiler personal
Decidir cuánto debe pagar por el alquiler no siempre es un cálculo sencillo. Superar el umbral recomendado del 30 % de sus ingresos mensuales brutos puede hacer que sea más difícil cubrir otros gastos y cumplir las metas de ahorro. Sin embargo, la asequibilidad de alquiler personal puede variar dependiendo de una variedad de factores, como el presupuesto general, las deudas pendientes, la ubicación geográfica y demás costos relacionados con la vivienda.
Revisar detenidamente sus finanzas personales puede ayudarle a determinar la cantidad de alquiler que puede pagar sin caer en una tensión financiera. El proceso implica analizar sus ingresos, gastos y objetivos de ahorro para determinar la cantidad máxima de la que dispone para vivienda.
Cómo calcular el 30 % de sus ingresos brutos para el alquiler
Los ingresos brutos equivalen a los ingresos antes de impuestos o deducciones. Para calcular esta cifra, revise su cheque de nómina y busque el renglón denominado “sueldo bruto”.
- Si recibe su sueldo cada dos semanas: Multiplique el monto del sueldo bruto por 26 para calcular el sueldo bruto anual. Después, divida la cifra anual entre 12 para determinar los ingresos brutos mensuales promedio.
- Si recibe su sueldo dos veces al mes: Multiplique el monto del sueldo bruto por dos para determinar los ingresos brutos mensuales.
- Si recibe su sueldo cada mes: Utilice el monto del sueldo bruto que aparece en su cheque de nómina.
Para calcular el 30 % de sus ingresos brutos mensuales, multiplique el monto anterior por 0.3. Por ejemplo:
Ingresos brutos mensuales: $5,000
30 % de $5,000: $5,000 x 0.3 = $1,500
Según la regla del 30 %, una persona cuyos ingresos brutos mensuales son de $5,000 podría permitirse gastar razonablemente $1,500 al mes en alquiler. Sin embargo, es importante recordar que esta es solo una pauta. Por ejemplo, si vive en una zona donde el alquiler promedio supera su umbral del 30 % y reubicarse no es una opción, tal vez sea necesario que asigne una parte más grande de sus ingresos a vivienda.
Por otro lado, gastar más del 30 % de sus ingresos en alquiler podría generar una tensión excesiva en su presupuesto. En este caso, puede ser necesario que reduzca los costos del alquiler para dejar disponibles ingresos para otros gastos.
Cuándo podría resultar lógico gastar más del 30 % en alquiler
Dependiendo de sus circunstancias y metas, la pauta de elegir una vivienda cuyos costos de alquiler superen el 30 % puede resultar lógica. Algunos posibles beneficios de pagar un alquiler más alto incluyen:
- Menores costos para trasladarse al trabajo: Elegir un apartamento más costoso que esté más cerca del trabajo o la escuela puede permitirle ahorrar tiempo y costos de transporte.
- Protección y seguridad: Dar prioridad a un vecindario más seguro puede brindarle tranquilidad, incluso si eso significa gastar más dinero en alquiler.
- Calidad de vida: Una ubicación que mejore significativamente la calidad de vida, por ejemplo, estar cerca de la naturaleza, centros culturales u oportunidades sociales, puede valer la pena el dinero extra.
- Servicios exclusivos: Un apartamento que ofrezca servicios exclusivos puede ayudarle a ahorrar dinero en otros aspectos. Por ejemplo, un alquiler que incluya servicios públicos o acceso a un gimnasio puede compensar el alquiler más alto.
Consejos para hacer un presupuesto para costos de alquiler más altos
Cuando se justifiquen los costos de alquiler más altos, es posible que sea necesario hacer otros ajustes al presupuesto. Los siguientes consejos pueden ayudarle a cubrir los costos de su alquiler si estos superan el umbral recomendado del 30 %.
1. Divida los costos con un compañero de piso
Compartir los costos de alquiler con un compañero de piso puede ayudarle a poder pagar un espacio vital más agradable sin exceder mucho su presupuesto. A menudo, compartir los costos de un alquiler de dos o tres habitaciones con otras personas reduce el gasto de vivienda total de cada persona. Considere utilizar Zelle® para dividir los costos de alquiler fácilmente sin cargos extras.
2. Reduzca los demás gastos
Monitorear los gastos a menudo puede ayudarle a identificar las áreas que se pueden reducir. Reducir los gastos discrecionales, como salir a comer, ir de compras o el entretenimiento pueden crear margen en su presupuesto para asumir un costo de alquiler más alto.
3. Liquide las deudas pendientes
Asignar una parte más grande de su presupuesto para liquidar tarjetas de crédito, préstamos para vehículos y demás deudas puede ayudarle a eliminarlas con mayor rapidez. Una vez liquidadas, puede destinar el dinero en efectivo extra para los pagos de alquiler. Dependiendo de su situación, la consolidación de deudas o el refinanciamiento puede ayudar a reducir sus pagos mensuales de inmediato, dejando un margen en su presupuesto para pagos de alquiler más altos.
4. Aumente sus ingresos
Considere aumentar sus ingresos solicitando un aumento de sueldo o una promoción, consiguiendo un segundo empleo o haciendo trabajo por cuenta propia o por encargo. Vender artículos que ya no utilice también puede generar una infusión de efectivo a corto plazo.
La regla 50/30/20
Si la regla del 30 % no le funciona, considere la regla 50/30/20. Esta pauta ofrece una estructura de presupuesto más amplia que divide los ingresos mensuales después de impuestos en tres categorías de gasto:
- Gastos esenciales: 50 %
- Gastos no esenciales: 30 %
- Ahorros: 20 %
Esto comienza con la asignación de aproximadamente el 50 % de sus ingresos mensuales netos para gastos esenciales, como alquiler, comida, servicios públicos, seguro, pagos mínimos requeridos de deudas y transporte. Los gastos discrecionales, como salir a cenar, entretenimiento, viajes y pasatiempos representan aproximadamente el 30 % de los ingresos netos, mientras que el 20 % restante se asigna a los ahorros y el pago de deudas por encima del mínimo requerido.
La regla 50/30/20 es eficaz porque genera un equilibrio entre las obligaciones financieras, el estilo de vida y la acumulación de patrimonio. Clasificar los gastos de esta manera le permite financiar sus necesidades y deseos al mismo tiempo que le permite ahorrar y realizar pagos extras en sus deudas, con lo que evita el ciclo de vivir al día.
Cómo aplicar la regla 50/30/20 al alquiler
Cuando se pregunta “¿cuánto debo pagar en alquiler?”, con frecuencia resulta útil examinar los costos del alquiler en relación con otras obligaciones financieras. A diferencia de la regla del 30 %, la regla 50/30/20 se basa en los porcentajes de sus ingresos netos o después de impuestos.
Por ejemplo, suponga que sus ingresos mensuales brutos son de $4,500 y su alquiler mensual es de $1,400. Dicha cantidad supera el 30 % de sus ingresos brutos. Sin embargo, si sus ingresos mensuales netos son de $4,000, con base en la pauta 50/30/20, puede gastar:
- $2,000 (50 %) en gastos esenciales
- $1,200 (30 %) en deseos de estilo de vida
- $800 (20 %) en ahorros y gastos extras de deudas
Suponiendo que los gastos esenciales restantes son menores o iguales que $600 ($2,000 menos $1,400), tal vez pueda cubrir el alquiler sin sufrir una tensión innecesaria. Sin embargo, si esto genera estrés en su presupuesto, reducir el gasto de alquiler podría generar incluso un mayor margen para cubrir sus obligaciones financieras mensuales.
Costos adicionales al alquiler mensual
Aunque a menudo el alquiler comprende la parte más grande de los costos de vivienda, normalmente hay otros gastos a considerar. Mientras analiza cuál es la parte de su salario que debe destinar al alquiler, no olvide incluir los siguientes gastos:
Depósitos de seguridad
Muchos arrendadores exigen un depósito de seguridad, que a menudo equivale a uno o dos meses de alquiler y se debe pagar por adelantado al momento de firmar el arrendamiento. Para un apartamento cuyo alquiler es de $1,000 al mes, significa que deberá tener entre $2,000 y $3,000 adicionales cuando llegue el día de mudarse.
Ahorrar para este costo inicial elevado con anticipación puede ayudarle a evitar generar estrés excesivo en su presupuesto. Considere configurar transferencias automáticas a una cuenta de ahorros designada de seis a 12 meses antes de mudarse para que pueda cubrir el costo con el tiempo en lugar de agotar sus fondos para emergencias.
Seguro de arrendatarios
Muchos arrendadores y agencias de administración de propiedades exigen el seguro de arrendatarios como parte del contrato de alquiler. La cobertura de seguro de arrendatarios brinda una protección valiosa para sus pertenencias en el supuesto que se presenten incidentes como robo o inundaciones. También ofrece cobertura de responsabilidad civil si una persona se lesiona en su unidad.
Debido a que el seguro de arrendatarios no cubre la estructura del inmueble, los costos son significativamente más bajos que una póliza de seguro del propietario de vivienda tradicional. Los planes de seguro de arrendatarios estándar tienen un costo promedio de $15 a $30 por mes, aunque se incluyen muchos factores en la determinación del costo de la cobertura, y su plan puede ser distinto[2].
Costos de servicios públicos
Si los servicios públicos como la electricidad, el agua y la recolección de basura no se incluyen en el alquiler, dichos gastos se deben agregar al presupuesto de vivienda. El costo de los servicios públicos a menudo supone una sorpresa para los nuevos arrendatarios, en particular en los apartamentos más viejos que tienen material aislante deficiente o electrodomésticos poco eficaces. Al explorar las opciones de alquiler, solicite los costos promedio de los servicios públicos del lugar. Esto le ayudará a evitar sorpresas debido a los costos y le permitirá agregar una estimación realista a su presupuesto de vivienda.
Costos de mudanza
No subestime el costo de mudarse a un nuevo lugar de alquiler. Contratar personal de mudanza, alquilar camiones de mudanza, reemplazar los muebles viejos y demás gastos relacionados con la mudanza se pueden acumular rápidamente. Ya sea que pretenda gastar unos cuantos cientos o unos cuantos miles de dólares en la mudanza, ahorrar tanto como sea posible con anticipación puede ayudarle a reducir la tensión financiera. Esto puede requerir que asigne más del 20 % para ahorros durante los meses anteriores a la mudanza, y hacerlo puede requerir que reduzca sus gastos no esenciales.
Reflexión final sobre la asequibilidad del alquiler y la salud financiera
La respuesta a la pregunta “¿cuándo debe pagar en alquiler?” no siempre es simple. Aunque basar el gasto de alquiler en pautas como el 30 % de sus ingresos brutos o la regla 50/30/20 le puede ayudar a empezar, se consideran muchas variables al determinar el porcentaje de ingresos que se deben destinar al alquiler.
Analizar detenidamente los factores como su estado financiero actual, deudas pendientes, ubicación geográfica y necesidades de estilo de vida le ayudará a realizar concesiones informadas entre los costos y la conveniencia.
Darse el tiempo para calcular los gastos de vivienda, compararlos con sus ingresos y definir las características imprescindibles de la vivienda de alquiler le ayudará a determinar parámetros de precio realistas en lugar de porcentajes. Este proceso le brindará claridad para que pueda alinear su gasto de vivienda con sus metas financieras a largo plazo.