Comenzar un trabajo complementario se ha convertido en la principal forma de ganar algo de dinero extra. Tener este tipo de ingresos es especialmente atractivo si eres un estudiante universitario que vive ceñido a un presupuesto. Además, los trabajos complementarios pueden atraer tu lado empresarial y brindarte una experiencia comercial del mundo real, o poner a prueba tu talento creativo mientras obtienes tu título universitario.
Pero, ¿cómo puedes empezar un trabajo complementario y qué consideraciones financieras debes tomar? Esta guía de inicio rápido puede ayudar a responder preguntas mientras te embarcas en este ambicioso esfuerzo.
1. Piensa en posibles ideas para tu trabajo complementario
Cuando comienzas una aventura empresarial en la universidad, considera qué es lo que más te entusiasma. Una de las mejores cosas sobre comenzar un negocio complementario es la cantidad de cosas creativas y prácticas que puedes hacer. Tu trabajo puede ser un reflejo directo de tus intereses, conocimiento y experiencia.
Algunos ejemplos de cosas que puedes hacer para ganar dinero en tu tiempo libre son:
- Cuidar mascotas, cuidar bebés o cuidar casas.
- Convertirte en un comprador misterioso.
- Ofrecer servicios de mantenimiento de césped.
- Tutoría o consultoría, ya sea en persona o en línea.
- Escribir en forma independiente.
- Revender artículos en línea.
- Convertirte en asistente virtual.
- Comenzar un blog
- Desarrollar una aplicación.
- Vender un producto único que hayas desarrollado.
- Hacer encuestas.
2. Establece un presupuesto inicial para tu trabajo complementario
Cada oportunidad es distinta. En algunas, puedes comenzar sin costos iniciales; otras pueden requerir una pequeña inversión. Si tienes una idea específica de un trabajo complementario, el siguiente paso es averiguar cuánto necesitarás para empezar.
Por ejemplo, si quieres intentar escribir en forma independiente, tus únicos costos iniciales pueden ser comprar una computadora portátil y cubrir servicio de Internet, lo cual es probable que ya tengas. Por otro lado, si vas a comenzar tu propio negocio complementario ofreciendo mantenimiento de césped, necesitarás el equipo correcto para empezar.
Si sabes que necesitarás un pequeño capital para comenzar tu trabajo complementario, considera dónde puedes conseguir el dinero. Tal vez tengas lo suficiente ahorrado para comprar las herramientas necesarias para empezar. Otra opción es recurrir a las personas que conoces: pedir ayuda a familiares y amigos para financiar tus costos iniciales.
3. Desarrolla el plan de lanzamiento de tu trabajo complementario
Desarrollar un plan de lanzamiento es una parte fundamental para hacer que tu idea despegue.
Por ejemplo, si quieres comenzar cuidando mascotas, deberás publicitar tus servicios. O, si estás vendiendo un producto, como artículos hechos a mano, puedes tener que crear una página web o identificar lugares donde puedas presentarte y conseguir un estand.
Algunas consideraciones de investigación para tu plan de divulgación y lanzamiento incluyen:
- ¿Quién es el público objetivo para tu producto/servicio?
- ¿Cuánto tiempo tienes para dedicarle a estos esfuerzos cada semana?
- ¿Cuál es la tarifa normal de tus productos/servicios?
- ¿Cómo puedes establecer una tarifa horaria o por proyecto que sea competitiva?
- ¿Cuál es la forma más efectiva de pasar la voz sobre tu trabajo complementario?
- ¿Cómo puedes aprovechar tu red de contactos para hacer que tu lanzamiento sea más exitoso?
Puedes querer llegar a todas las personas de tu red de contactos, como amigos de la familia o profesores que puedan ofrecerte orientación comercial. Otros recursos que pueden ayudarte en la planificación incluyen leer material de marketing y empresarial, el cual puede estar disponible en tu sede universitaria o en línea.
4. Ten un plan para el dinero que ganes
Por último, una vez que comiences a ganar dinero con tu arduo trabajo, puedes decidir cómo usarlo mejor.
Puedes usar efectivo de tu trabajo complementario en miles de formas, una de las cuales es reinvertir en tu negocio. Si quieres expandirte y mejorar, puedes usar algunas de tus ganancias para desarrollar capacidades comerciales.
Otra forma de progresar financieramente es comenzar a pagar tus deudas antes: reducir tu préstamo estudiantil antes de graduarte es un gran logro y puede darte frutos en el futuro. También, si puedes comenzar a ahorrar para el futuro desde ahora, puedes alcanzar metas como crear un fondo de emergencia o de viajes.