Es posible que en algún momento le interese utilizar crédito. ¿Parece una buena idea, no? La capacidad de usar el dinero de alguien más hoy y reembolsarlo después es una idea verdaderamente genial. Cuando se utilizan de manera inteligente, las tarjetas de crédito le pueden ayudar a establecer un puntaje de crédito, asegurar un financiamiento más barato, etc. Sin embargo, si se utilizan de manera irresponsable, las tarjetas de crédito pueden generar un aprieto financiero que puede durar mucho tiempo.

Aunque puede que no sea prudente recurrir por completo al crédito como alumno universitario, es importante empezar a establecer un historial crediticio cuando sea razonablemente posible. He aquí algunas maneras sencillas para desarrollar buenos hábitos crediticios y comenzar a establecer un historial crediticio, sin meterse en problemas.

Cómo establecer un historial crediticio positivo

Es importante entender el sistema de puntaje de crédito cuando empiece a establecer su historial crediticio. Hay cinco componentes principales sobre los cuales le califican. Dichos componentes determinan su puntaje de crédito.

Historia del crédito: el tiempo que lleva utilizando crédito. Cuanto más tiempo, mejor.
Historial crediticio: qué tan bien ha estado administrando sus pagos. ¿Siempre paga a tiempo, o en ocasiones (o siempre) paga con retraso? Es importante pagar a tiempo para tener un buen puntaje.
Relación límite de crédito-balance: el porcentaje de crédito que utiliza en comparación con el crédito del que dispone. Es mejor utilizar un porcentaje menor.
Tipos de crédito: una buena combinación entre préstamos a plazos, crédito en tiendas y tarjetas de crédito reconocidas le ayudarán a obtener un buen puntaje.
Frecuencia de créditos nuevos recibidos: cuanta menor sea la frecuencia con la cual solicita crédito, mejor. Está bien sacar diferentes tarjetas de crédito con el tiempo, pero no lo haga todo al mismo tiempo.

Como alumno universitario, lo mejor sería enfocarse en los primeros tres componentes. La historia del crédito y el historial crediticio son dos de los factores más importantes al momento de determinar su puntaje de crédito. El motivo primario por el cual debe establecer un historial crediticio es para solicitar dinero prestado (p. ej. para comprar su primera casa) o para demostrar a una persona o empresa que deben confiar en usted y contar con que mantendrá su palabra.

Cómo establecer buenos hábitos de crédito

Utilice una tarjeta de crédito asegurada

Una manera de familiarizarse con el uso del crédito es empezar con una tarjeta de crédito asegurada. Una tarjeta de crédito asegurada es una tarjeta de crédito en la cual la línea de crédito se basa en un depósito que ha hecho en un banco. Supongamos que le aprueban para una tarjeta de crédito asegurada y deposita $500 para asegurar la línea de crédito. El banco le permitirá utilizar una tarjeta de crédito con un límite de $500.

Si no tiene historial crediticio, quizás sea más fácil que le aprueben una tarjeta de crédito asegurada que una tarjeta de crédito estándar. El dinero que deposite es su promesa ante el banco de que pagará el balance de la tarjeta.

Pague el balance completo

La mejor manera de utilizar una tarjeta de crédito es pagar el balance completo cada mes. Realice cargos únicamente por lo que pueda pagar cuando venza su factura. Para hacerlo, debe incluir la tarjeta de crédito como parte de su presupuesto mensual. Domicilie el pago de una factura recurrente, por ejemplo, su servicio de telefonía celular, para que se cargue a su tarjeta cada mes. Después, cada vez que le paguen, liquide la totalidad del balance de la tarjeta.

Practique con una tarjeta de débito prepagada

Aunque no podrá establecer un crédito con una tarjeta prepagada, esta puede ser una buena manera de practicar antes de obtener una tarjeta de crédito. Las tarjetas prepagadas, de hecho, se consideran tarjetas de débito. Esto se debe a que solo puede acceder al dinero que haya “cargado” en la tarjeta. Por otro lado, una tarjeta de crédito representa dinero que solicita en préstamo. Se trata de dinero que no necesariamente tiene a la mano.

Si tiene un balance pendiente en una tarjeta de crédito, tiene que pagar intereses sobre dicho saldo. En el caso de una tarjeta de débito prepagada, solo utiliza el dinero que tiene. Si utiliza todo el dinero relacionado con la tarjeta prepagada, tendrá que agregar más dinero, o de lo contrario no podrá gastar. Con una tarjeta prepagada no pagará intereses, aunque es posible que implique muchos otros cargos, por lo que debe asegurarse de leer los términos detenidamente antes de empezar a utilizar una.

Las principales ventajas de las tarjetas prepagadas es que son fáciles de usar y le sacan de apuros. Puede pagar con tarjeta sin la necesidad de utilizar crédito.

La mayor desventaja de las tarjetas de débito prepagadas es que algunos de los cargos que cobran pueden empezar a acumularse. Muchas tarjetas prepagadas cobran cargos mensuales, cargos por activación, cargos por uso en cajeros automáticos, cargos por consulta de balance e incluso cargos por llamar a servicio al cliente y por hablar con un representante. Si decide que le conviene una tarjeta de débito prepagada, primero debe revisar bien el plan de cargos.

¿Cómo empezó a establecer su crédito?