Pareciera que los adolescentes siempre necesitan dinero, ya sea para salir con sus amigos, comprar ropa o para los pasatiempos que les gustan. Por eso, cuando llegue el momento para que aprendan sobre la administración del dinero, una cuenta bancaria puede ser la opción adecuada.

Las cuentas bancarias para adolescentes ofrecen los mejores beneficios de banca para adultos además de ciertos beneficios de educación.

¿Está listo para empoderar a la próxima generación de gastadores y ahorradores inteligentes? Esto es lo que debe saber.

Razones para que un adolescente tenga una cuenta bancaria

Puede que los adolescentes tengan buenas intenciones y aún así les resulte fácil gastar de más. Es por eso que puede resultar difícil asumir la responsabilidad del dinero que tienen guardado en una alcancía o que es administrado por uno de sus padres. Cuando el adolescente tiene el control del dinero, puede ver como este aumenta con el tiempo. También puede ser más probable que el adolescente cumpla metas y asuma un enfoque práctico con respecto a los gastos.

Los adolescentes que tienen cuentas propias pueden aprender a:

  • Hacer presupuestos para compras importantes
  • Usar las aplicaciones y las herramientas de la banca móvil
  • Usar una tarjeta de débito o una billetera digital
  • Hacer depósitos y retiros
  • Usar el lenguaje de las finanzas personales

Cómo puede un adolescente abrir una cuenta bancaria

Sabemos que la respuesta a la pregunta “¿un adolescente puede tener una cuenta bancaria?” es “sí”. Entonces, ¿cómo se aborda tal asunto? 

Los adolescentes que aún son menores de edad en el estado donde viven (normalmente aquellos menores de 19 o 18 años) necesitarán que su padre, madre o tutor les ayude a abrir una cuenta. Dependiendo de los requisitos de la institución financiera, es posible que se necesite una identificación expedida por el gobierno ya sea para el adolescente, el tutor o ambos. El banco probablemente solicitará un comprobante de domicilio[1] con la dirección a la cual se enviarán los documentos bancarios, así como un depósito mínimo para empezar con la cuenta. Sin embargo, algunas cuentas no necesitan un depósito inicial, por lo que debe consultar con su institución financiera para obtener los detalles. 

Con la ayuda de su padre o madre, un adolescente puede abrir una cuenta en línea o en persona.

¿Un adolescente debe tener tanto una cuenta de cheques como una de ahorros?

Las cuentas de cheques y las cuentas de ahorros ofrecen cosas muy diferentes. Si bien normalmente puede hacer depósitos y retiros en ambos tipos de cuentas, una cuenta de cheques está diseñada para hacer retiros más frecuentes, realizar el pago de facturas o administrar varias transacciones mensuales. Con frecuencia está vinculada a una tarjeta de débito, por lo que los adolescentes pueden hacer compras fácilmente en comercios minoristas, gasolineras o su tienda en línea favorita.

Por otro lado, las cuentas de ahorros están diseñadas para metas de ahorro a corto y largo plazo, por lo que realizar más de unos cuantos retiros al mes puede generar cargos elevados. Comprender las metas financieras del adolescente puede ayudarle a guiarlo a la opción correcta. O bien, enséñele a ser incluso más inteligente con el dinero al abrir ambos tipos de cuentas y mostrarle cómo transferir el dinero entre dichas cuentas cuando sea necesario.

¿Los adolescentes tendrán que abrir nuevas cuentas cuando sean adultos?

Las cuentas para estudiantes o adolescentes requieren que el padre, la madre o un tutor actúe en calidad de cofirmante al momento de la apertura. El adulto puede ser el titular primario o secundario de la cuenta. Sin embargo, si se ha designado al adolescente como titular primario de la cuenta, el cofirmante tendría que estar de acuerdo en ser retirado de la cuenta.

Lo que debe buscar en una cuenta bancaria para adolescentes

Muchos bancos ofrecen opciones de cuentas bancarias para estudiantes o adolescentes. Son una excelente manera para aprender sobre finanzas y establecer una relación con un futuro cliente adulto. Sin embargo, no todas las cuentas son iguales. Hágase estas preguntas cuando esté comparando opciones:

  • ¿Mi hijo necesita una cuenta de ahorros, una cuenta de cheques o ambas?
    • Considere lo sencillo que es abrir ambas al mismo tiempo y si se pueden vincular para que su mantenimiento sea más fácil.
  • ¿Cuáles son los cargos asociados con una cuenta para estudiantes? 
    • Aunque puede exentar algunos cargos al mantener un saldo mínimo, verifique la forma en que las cuentas “sin cargos” pueden permanecer libres de cargos.
  • ¿Cómo se manejan los sobregiros? 
    • Pregunte sobre el período de gracia o el monto determinado de sobregiro que se puede manejar sin pagar un cargo elevado.
  • ¿Qué tipo de tarjeta de débito incluye la cuenta? 
    • Algunas tarjetas se pueden utilizar de forma virtual o como parte de una billetera digital, al igual que en forma física.
  • ¿Cuáles son las aplicaciones u otras herramientas financieras que incluye la cuenta? 
    • Examine el nivel de detalle de las aplicaciones y herramientas de elaboración de presupuestos para ver si existe un componente educativo.
  • ¿Qué sucede con la cuenta cuando mi estudiante se convierte en adulto? 
    • Entérese si debe tomar alguna medida especial o si la cuenta se convierte automáticamente.

También puede optar por una cuenta para estudiantes en un banco con el que usted ya hace negocios. Debido a que es común que maneje varios asuntos de dinero en un solo banco, esta opción puede ser conveniente. Considere elegir un banco en el que pueda abrir una cuenta para estudiantes y ayúdele con su primer préstamo para automóvil, préstamo estudiantil o tarjeta de crédito.

Las mejores maneras de usar una cuenta bancaria para adolescentes

Una vez que haya abierto la cuenta, considere cómo su adolescente puede comenzar a utilizarla de inmediato. Una meta de ahorro quizás sea el mejor lugar para empezar. Motive a su adolescente para que establezca un plan de ahorro, sin importar si contribuye $15 al mes, $150 o una cantidad incluso mayor.

Pida a su adolescente que planifique cuánto tiempo le llevará lograr su meta y lo que hará cuando la logre. ¿Planificará otra meta? ¿Puede tener más de una meta financiera al mismo tiempo?

Al usar estas misiones financieras más pequeñas, los estudiantes pueden aprender mucho sobre lo sencillo que puede ser ahorrar para algo importante y aún así poder manejar las sorpresas, como los ingresos inestables o los gastos imprevistos.

También puede intentar que planifique cada dólar. Por ejemplo, una estrategia de donación/ahorro/gasto le permite reservar determinada cantidad de la totalidad de su dinero para una meta especial. Su adolescente puede designar $0.30 de cada dólar para gastar y $0.50 para ahorrar, así como $0.20 para donar, si así lo decide. Sin importar los valores que elija, hay un plan que igualar. Puede practicar depositando estas cantidades en sus respectivas cuentas de estudiante y mirar cómo su dinero crece.

Siguientes pasos para la educación financiera

¿Busca maneras adicionales para ayudar a los estudiantes a administrar el dinero? La cuenta PNC Virtual Wallet Student ofrece herramientas para crear un mejor presupuesto, gastar de forma inteligente y ahorrar para metas importantes.