La vida en la universidad puede ser costosa, por lo que es muy importante que tome decisiones inteligentes con respecto a sus finanzas. Y aunque no lo crea, saber qué no hacer es tan importante como saber qué hacer. No se deje sorprender por estas posibles dificultades financieras.
1. No contar con un presupuesto para gestionar sus gastos.
Si no ha establecido un presupuesto para sus gastos, está dejando de lado una de las maneras más fáciles de mantener sus finanzas bajo control. Analice en qué gasta su dinero y elabore un plan para saber en qué va a gastarlo en el futuro. Inclusive puede considerar incluir un depósito mensual en su cuenta de ahorros para que tenga dinero de reserva en caso de que surjan gastos inesperados.
2. Generar una deuda en su tarjeta de crédito.
Cuando se inscribió para su tarjeta de crédito, ¿leyó las condiciones en letra pequeña? Las personas que no lo hacen en ocasiones se sorprenden al descubrir cuánto interés se ha generado cuando no liquidan su saldo cada mes. Dichos cargos se pueden acumular con rapidez. Por lo tanto, utilice su tarjeta de crédito con sensatez para realizar compras que sabe que podrá liquidar y lleve un control de las compras que realice con su tarjeta para que el saldo de su cuenta no se salga de control.
3. No solicitar ayuda financiera ni becas.
Cada año, es posible que los alumnos dejen pasar oportunidades de obtener dinero de forma gratuita por no solicitar becas y no llenar la solicitud de FAFSA® (es decir, la solicitud gratuita para obtener ayuda estudiantil federal). Su solicitud de FAFSA revela el monto de ayuda financiera para el cual podría calificar y el tipo de préstamos que se le puede ofrecer. Las becas, las cuales se ofrecen a través de su escuela y a través de terceros independientes, también le pueden ayudar en gran medida a cubrir los gastos de su educación.
4. Utilizar los fondos de los préstamos estudiantiles para fines distintos a sus estudios.
Si califica para recibir préstamos estudiantiles, la posibilidad de tener esa gran cantidad de dinero disponible puede ser tentadora. Sin embargo, recuerde que tendrá que pagar dichos préstamos, por lo general, con intereses. Limítese únicamente a los gastos relacionados con su educación. No realice compras frívolas, por ejemplo, compras relacionadas con vacaciones o boletos de conciertos. Cuando llegue el momento de pagar dichos préstamos, le alegrará el haber solicitado un préstamo únicamente por el monto absolutamente necesario.
5. No reunirse con su asesor académico:
Sentarse junto a su asesor académico para definir un plan puede ayudarle a evitar algunos gastos innecesarios. Su asesor le podrá ayudar a identificar las asignaturas correctas y el número de materias que debe tomar, así como a determinar si podrá eximir algunas asignaturas. Esto puede ayudarle no solo a que se gradúe a tiempo, sino también a no pagar por materias innecesarias.
6. No aprovechar los descuentos y beneficios para universitarios.
Al ser un alumno universitario inscrito es posible que automáticamente sea elegible para recibir varios descuentos y servicios gratuitos, por ejemplo, transporte gratuito en el campus y membresías de gimnasios, así como descuentos en restaurantes y cines locales. Investigue lo que su universidad y su comunidad ofrecen y comience a ahorrar.
Tenga en cuenta el establecimiento de hábitos financieros positivos y aproveche las oportunidades que se le presentan. Para más información, visite pnc.com/myfinanceacademy.