Las charlas sobre el dinero pueden ser un poco incómodas, especialmente para las nuevas parejas. La investigación muestra que dos tercios de las parejas comprometidas tienen sentimientos negativos sobre las conversaciones financieras con su prometido, según una encuesta de la National Foundation for Credit Counseling.[1]

Para ayudarte a superar la incomodidad de las conversaciones financieras, aquí tienes tres preguntas para facilitar la conversación:

1. ¿Cómo fusionaremos nuestras finanzas?

Si estás recién casado, probablemente ya has resuelto cosas como la vivienda, qué tipo de muebles de dormitorio son los mejores y cómo tu gato y perro sobrevivirán bajo un mismo techo. Has fusionado tus pertenencias, pero ¿estás listo para fusionar tus finanzas?

Es hora de averiguarlo. Siéntate y habla sobre si quieres fusionar cuentas bancarias o crear tres cuentas: La tuya, la mía y la nuestra. Si eliges la última opción, define qué gastos son “nuestros” y luego decide cuánto dinero agregarán cada uno de ustedes a esa cuenta cada mes y cuándo.

Cada persona administra sus finanzas de manera un poco diferente, pero tu necesitas hacer un plan que se encargue de tus responsabilidades financieras en conjunto.

2. ¿Qué cantidad representa nuestra deuda y cómo debemos administrarla?

Haz una lista de todas las deudas que tengas, incluyendo los pagos a largo plazo que tengan saldos altos, tales como tarjetas de crédito, préstamos para automóviles y préstamos estudiantiles. Es importante tener una idea clara de qué cantidad representa la deuda que cada persona trae a la relación.

Si tu futuro cónyuge tiene una deuda de seis cifras por los gastos de la universidad, es importante saberlo. Los grandes pagos de préstamos estudiantiles podrían limitar tu poder de compra en el futuro cuando estés listo para hacer grandes cambios en tu vida, como comprar una casa.

Tendrás que pensar en un plan para administrar la deuda. Podrías considerar identificar la deuda con la tasa de interés más alta y pagarla primero.

Si necesitas ayuda para hacer un plan, un asesor financiero puede ayudarte a proporcionar una dirección más detallada.  

3. ¿Cómo administraban el dinero sus padres?

La mayoría de los adultos toman las señales financieras de sus padres. Si tus padres estaban constantemente cortos de dinero, mientras que los padres de tu pareja hacían espléndidos viajes a Europa dos veces al año, probablemente tengas maneras muy diferentes de ver las finanzas y los gastos.

Es importante hablar sobre la forma en que tus padres manejaron el dinero y examinar las maneras en que influyeron en tus decisiones financieras. Comparte tus experiencias y establece una meta para elevar tu enfoque financiero más allá del de tus padres.

Compartir una vida en común significa más que compartir una casa y una contraseña de wifi. El matrimonio une sus vidas financieras, y es importante tener conversaciones abiertas y honestas sobre el dinero desde el principio para asegurar un futuro feliz y sólido desde el punto de vista financiero.