Para muchas empresas, el año 2023 resultó ser el año para “esperar y ver”. La actual incertidumbre económica que rodea al entorno de las tasas de interés y la posibilidad de una recesión inminente, que se han visto agravadas por las preocupaciones referentes a las tensiones geopolíticas y el próximo año de elección en los Estados Unidos, han dejado a muchas empresas en pausa en términos de tomar medidas sobre las prioridades estratégicas, pues no están seguras de cuáles deben ser sus próximas acciones y cuándo deben llevarlas a cabo.
Mientras esperan a que haya claridad con respecto a lo que podría vislumbrarse en el horizonte, muchas compañías se han centrado en gestionar los ingresos y la eficiencia, a fin de garantizar que su perfil crediticio esté en orden y otros aspectos de su estrategia que tienen la posibilidad de controlar. “Este es un enfoque sensato para dirigir una empresa con responsabilidad, aunque puede presentar obstáculos con respecto al crecimiento, según Terry Begley, jefe de banca corporativa de PNC Bank”. “Las compañías pueden darse cuenta, si esperan demasiado para obtener respuestas claras, que pueden perderse algunas oportunidades rumbo a 2024”, dijo Begley. “En el caso de las empresas que aspiran al crecimiento, quizás sea el momento para pensar en evitar el modo de espera para que estén listas cuando aparezcan las señales de recuperación”.
Es posible que lograrlo requiera desarrollar cierto nivel de confort de manera conjunta con cierto nivel de incertidumbre continua. “No hay manera de saber con exactitud cómo será la economía mientras nos dirigimos rumbo a 2024. En lugar de esperar a ver cómo evolucionan las cosas, las empresas deben pensar en establecer un compromiso con su plan de negocio y sus metas a largo plazo, ya sea que se trate de una adquisición o lograr el crecimiento por otros medios”, dijo Begley. “Pueden implementar estrategias en torno a los supuestos económicos y del entorno de tasas que puedan modificarse con el tiempo, lo que puede ayudarles a cubrir algunos de los desafíos a corto plazo mientras siguen trabajando para lograr su estrategia a largo plazo”.
En el caso de las empresas que están interesadas en realizar adquisiciones, tomar medidas mientras siguen operando en el entorno actual puede requerir explorar valuaciones actualizadas y examinar la estructura de capital y la capacidad de financiamiento, lo que puede ser diferente a como era en el pasado reciente. Además, muchas compañías actualmente cuentan con financiamiento con vencimiento de corto plazo y tasas bajas, pero cada año los acerca más a las fechas de vencimiento de la deuda, lo que pone en primera fila las consideraciones sobre el refinanciamiento. Implementar estrategias de cobertura para gestionar el riesgo de tasas de interés sigue siendo importante, ya que la dirección que las tasas de interés tomarán en los próximos meses y años sigue siendo incierta.
Las relaciones bancarias sólidas pueden brindar una orientación importante para estos y otros desafíos. “En PNC, no podemos predecir cómo será el entorno económico exacto durante todo el 2024 o después de ese año”, dijo Begley. “Sin embargo, podemos trabajar estrechamente con las empresas para sugerir y desarrollar estrategias para prepararse para el éxito, tanto ahora como cuando mejore el panorama económico con el tiempo”.
Begley mencionó que no todas las necesidades apremiantes de la empresa tienen su origen en la incertidumbre macroeconómica actual. “Hay ciertos problemas en los que piensan las empresas que no necesariamente tienen una correlación directa con la presión económica actual, y un ejemplo prominente de ello es la planificación de sucesión empresarial. Actualmente, hay muchos propietarios de empresas que tienen la intención de retirarse de sus compañías, y es posible que tengan en mente objetivos muy particulares, que incluyen la elección del momento oportuno, las estrategias para transferir la propiedad, la planificación de los impuestos y de la sucesión, entre otros”, dijo Begley. “Quieren seguir adelante con esto a pesar de lo que está sucediendo en la economía. PNC tiene capacidades y recursos sólidos para guiarlos a través de esas decisiones y demás necesidades de la empresa”.
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La banca corporativa de PNC combina el conocimiento, la perspectiva y la toma de decisiones de un equipo local con la solidez y los recursos de uno de los bancos más grandes del país, a fin de ofrecer soluciones bancarias y de asesoramiento sofisticadas. Para obtener más información, póngase en contacto con su gerente de relaciones de PNC o contáctenos.
